¿Te pasa que…?
→ Te sientes rechazada por tu padre, sientes que no le importas.
→ Le guardas resentimiento por todo el daño acumulado, pero necesitas dejar de sentirlo y superarlo de una vez.
→ Crees que fuiste una buena hija/o y no entiendes el por qué… Por qué…
→ Sin el “paraguas” de tu padre te sientes vulnerable y desprotegida, a merced del viento.
→ Tienes problemas de celos con tu pareja y al final, tienes miedo a que un día se canse y se vaya.
→ Tienes la sensación de necesitar a tu pareja para sostenerte en pie. Él/Ella se ha convertido en tu tercera pata.
→ En el fondo de tu alma hay una emoción de que nadie puede llegar a amarte de verdad o que en cualquier momento pueden engañarte o abandonarte (irse con otra/o).
→ Nada te da la certeza y seguridad que necesitas.
→ Se te parte el alma solo de pensar que tu padre no te quiere.


